Uno de los problemas que se puede encontrar el técnico de mecanizado es la necesidad de distribuir una circunferencia o arco en divisiones equidistantes. Esta situación se nos puede presentar, por ejemplo, al mecanizar un engranaje o al realizar varios taladros sobre una circunferencia.
La cuadratura del círculo
Imaginemos que necesitamos mecanizar un cuadrado en un perfil redondo, lo primero que nos gustaría conocer son las dimensiones máximas del cuadrado que podremos obtener.
Para esto utilizaremos la trigonometría, tomando el triángulo marcado en la imagen, el cual sabemos que si a una vuelta entera le corresponden 360º a la mitad de un lado le corresponderán 45º.
Una vez conocemos este dato, será muy sencillo calcular cuanto debe penetrar la herramienta.
Una vez hemos hallado estas dimensiones ha llegado el momento de utilizar el plato divisor. Un plato divisor es un aparato con el que conseguimos una relación reductora entre la entrada y la salida. Esta relación toma el nombre de constante del plato y habitualmente suele ser de 40, lo que significa que, por cada 40 vueltas en la entrada, la salida (nuestra pieza) dará una vuelta. De esta forma, para hacer cuatro caras equidistantes será necesario mecanizar una cara, dar diez vueltas en la entrada y repetir el proceso hasta haber mecanizado las cuatro caras.
Este es uno de los ejemplos más sencillos de mecanizar con la ayuda del aparato divisor, debido a que la división nos da un número entero de vueltas y no es necesario hacer caso al plato de agujeros, pero ¿Qué pasaría si el resultado tuviese decimales? A esto se le dedicará otra entrada.
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